"Chaquetas de cuero, ropa oscura, humor negro y canciones con guitarras y bajos ultra hipnóticos. Así es el intenso show de Black Rebel Motorcycle Club. Los vimos al inicio de su gira 2008 en Alemania. Un sonido hermoso e impecable, que vas a poder oír en vivo en el Teatro Caupolicán el 3 de octubre, pagando uno de los pocos precios razonables del último tiempo: $12.000.
"Lo siento por el sol. Estábamos esperando que hubiese un poco de lluvia y nubes, en cambio nos tocó el fuckin sol", dice Robert Levon Been, bajista de Black Rebel Motorcycle Clubantes de abrir su set de 70 minutos en el Hurricane Festival. Obvio, si el tipo tenía que hacer un comentario gracioso, tenía que estar teñido de humor negro.
Aunque hay sol y están tocando en un festival del verano europeo, la banda carga con su propia nube obscura, armando un show que estéticamente funcionaría mejor en un club de chicos malos. Un club de motociclistas rebeldes.
Hay humo, chaquetas de cuero y el color negro los rodea. No importa si es un su ropa o el pelo enmarañado del bajista Robert Levon Been y el del guitarrista Peter Hayes, tampoco importa mucho el sol: Sobre el escenario la banda parece un grupo de nubes amenazantes que desde los parlantes desata una tormenta.
Esto de ver el lado más oscuro de la vida y tener pequeñas tragedias le sienta bien a BRMC. La primera vez que los vi fue en 2004 en Glastonbury, donde llegaron a tocar cuando recién habían terminado su relación contractual con Virgin Records. Y el guitarrista se encargó de darle las gracias a su público por estar ahí, con una sinceridad que se palpaba. "Cuando digo gracias, lo digo de veras: no tenemos sello que nos apoye y lo que nos trajo a este escenario son ustedes".
El público británico estaba rendido ante ellos, las chicas gritaban "you sexy fuckers", les mostraban algo de ropa interior de encaje (negro, obvio) mientras los chicos ni se inmutaban por los efectos de su sex appeal y simplemente tocaban con todo.
Fue un tremendo set con hits como "Whatever happened to my rock 'n roll", "Spread your love" y "Love burns" de su debut homónimo de 2000 o "Stop" del Take them on, on your own (2003) y una canción nueva que resultó ser nada menos que "Complicated situation" de Howl, el disco que editarían al año siguiente, incluyendo un minuto mega rocanrolero, cuando Robert bajó del escenario y se puso a tocar frente a la barrera que lo separaba del público.
Cuatro años más tarde la escena es parecida, pero la pequeña tragedia es diferente: unas semanas antes del show en Hurricane el 20 de junio de este año, mandaron un mensaje a la gente de su mailing list contando que el baterista Nick Jago no iba a seguir de gira por sus problemas con las drogas. (Error de la periodista, pero hay que dejarlo asi)
Su reemplazo para continuar fue la chica tras las baquetas en los shows de The Raveonettes: Leah Shapiro, quien hizo un trabajo más que correcto marcando el paso de su rock sicodélico, sólo desentonando levemente en su look –no en lo musical- ya que parece más una niña asustada que una rockera a lo BRMC.
En vivo el sonido de la banda es simplemente impecable y hermoso. Sobre el escenario son sólo un trío, pero logran que un espacio abierto donde hay miles de personas se convierta en un lugar ultra íntimo.
Desde el primer acorde las canciones te envuelven e hipnotizan y no te sueltan hasta que termina el show, logrando un efecto parecido al del gran concierto que Interpol dio en Santiago a principios de este año, pero con dos grandes diferencias: una mayor variedad de atmósferas y una actitud mucho más rockera y cercana al público.
Al setlist de Glasto 2004 —festival en el que BRMC estuvo entre los tres mejores shows— en esta gira 2008 se suman canciones de su tercer disco como "Shuffle your feet" y "Ain't no easy way". Y claro, temas de Baby 81 (2007) como "Berlin", "Weapon of choice" y "666 conducer", canción con la que abrieron.
Además en Alemania volvieron a estrenar una canción, "River Styx", que recuerda levemente a “Personal Jesus” de Depeche Modecon tintes del Nirvana.modelo Incesticide (1992).
Los estadounidenses son unos dignos herederos de The Jesus and Mary Chain y saben evitar que la hipnosis de sus oscuros bajos y guitarras te consuma, de eso se encargan sus canciones más blueseras y folk de guitarras acústicas, slide y armónica.
A pesar de que este set no fue muy diferente al de Glasto 2004, sigue siendo alucinante ver a la banda en acción. No es poco: en Hurricane tocaron bandas del calibre de Radiohead y Foo Fighters, y el show de BRMC no se achicó demasiado en comparación. Por lo demás guitarrista y bajista, que se turnan para cantar y hacer coros, son el estilo personificado. Dos tipos que logran sin esfuerzo, que tocar y fumar un cigarrillo se vea tan sexy como sus canciones.
Comentario publicado en revista Zona de Contacto (online) del portal de noticias Emol.com, es bastante certero al algunas descripciones de la banda y nada nuevo en algunas comparaciones, solo el error en lo de Nick Jago, pero es una de las mejores cosas que se ha publicado hasta el momento y queremos dejarlo registrado.
Con videos y fotos lo puedes ver aquí:
www.zona.cl
YA SABEN, BRMC EN CHILE:
03 de Octubre, Headline Show
Teatro Caupolicán, Santiago de Chile
Entradas a la venta en www.ticketmaster.cl
Valor $12000 pesos (más costo de servicio).
"Lo siento por el sol. Estábamos esperando que hubiese un poco de lluvia y nubes, en cambio nos tocó el fuckin sol", dice Robert Levon Been, bajista de Black Rebel Motorcycle Clubantes de abrir su set de 70 minutos en el Hurricane Festival. Obvio, si el tipo tenía que hacer un comentario gracioso, tenía que estar teñido de humor negro.
Aunque hay sol y están tocando en un festival del verano europeo, la banda carga con su propia nube obscura, armando un show que estéticamente funcionaría mejor en un club de chicos malos. Un club de motociclistas rebeldes.
Hay humo, chaquetas de cuero y el color negro los rodea. No importa si es un su ropa o el pelo enmarañado del bajista Robert Levon Been y el del guitarrista Peter Hayes, tampoco importa mucho el sol: Sobre el escenario la banda parece un grupo de nubes amenazantes que desde los parlantes desata una tormenta.
Esto de ver el lado más oscuro de la vida y tener pequeñas tragedias le sienta bien a BRMC. La primera vez que los vi fue en 2004 en Glastonbury, donde llegaron a tocar cuando recién habían terminado su relación contractual con Virgin Records. Y el guitarrista se encargó de darle las gracias a su público por estar ahí, con una sinceridad que se palpaba. "Cuando digo gracias, lo digo de veras: no tenemos sello que nos apoye y lo que nos trajo a este escenario son ustedes".
El público británico estaba rendido ante ellos, las chicas gritaban "you sexy fuckers", les mostraban algo de ropa interior de encaje (negro, obvio) mientras los chicos ni se inmutaban por los efectos de su sex appeal y simplemente tocaban con todo.
Fue un tremendo set con hits como "Whatever happened to my rock 'n roll", "Spread your love" y "Love burns" de su debut homónimo de 2000 o "Stop" del Take them on, on your own (2003) y una canción nueva que resultó ser nada menos que "Complicated situation" de Howl, el disco que editarían al año siguiente, incluyendo un minuto mega rocanrolero, cuando Robert bajó del escenario y se puso a tocar frente a la barrera que lo separaba del público.
Cuatro años más tarde la escena es parecida, pero la pequeña tragedia es diferente: unas semanas antes del show en Hurricane el 20 de junio de este año, mandaron un mensaje a la gente de su mailing list contando que el baterista Nick Jago no iba a seguir de gira por sus problemas con las drogas. (Error de la periodista, pero hay que dejarlo asi)
Su reemplazo para continuar fue la chica tras las baquetas en los shows de The Raveonettes: Leah Shapiro, quien hizo un trabajo más que correcto marcando el paso de su rock sicodélico, sólo desentonando levemente en su look –no en lo musical- ya que parece más una niña asustada que una rockera a lo BRMC.
En vivo el sonido de la banda es simplemente impecable y hermoso. Sobre el escenario son sólo un trío, pero logran que un espacio abierto donde hay miles de personas se convierta en un lugar ultra íntimo.
Desde el primer acorde las canciones te envuelven e hipnotizan y no te sueltan hasta que termina el show, logrando un efecto parecido al del gran concierto que Interpol dio en Santiago a principios de este año, pero con dos grandes diferencias: una mayor variedad de atmósferas y una actitud mucho más rockera y cercana al público.
Al setlist de Glasto 2004 —festival en el que BRMC estuvo entre los tres mejores shows— en esta gira 2008 se suman canciones de su tercer disco como "Shuffle your feet" y "Ain't no easy way". Y claro, temas de Baby 81 (2007) como "Berlin", "Weapon of choice" y "666 conducer", canción con la que abrieron.
Además en Alemania volvieron a estrenar una canción, "River Styx", que recuerda levemente a “Personal Jesus” de Depeche Modecon tintes del Nirvana.modelo Incesticide (1992).
Los estadounidenses son unos dignos herederos de The Jesus and Mary Chain y saben evitar que la hipnosis de sus oscuros bajos y guitarras te consuma, de eso se encargan sus canciones más blueseras y folk de guitarras acústicas, slide y armónica.
A pesar de que este set no fue muy diferente al de Glasto 2004, sigue siendo alucinante ver a la banda en acción. No es poco: en Hurricane tocaron bandas del calibre de Radiohead y Foo Fighters, y el show de BRMC no se achicó demasiado en comparación. Por lo demás guitarrista y bajista, que se turnan para cantar y hacer coros, son el estilo personificado. Dos tipos que logran sin esfuerzo, que tocar y fumar un cigarrillo se vea tan sexy como sus canciones.
Comentario publicado en revista Zona de Contacto (online) del portal de noticias Emol.com, es bastante certero al algunas descripciones de la banda y nada nuevo en algunas comparaciones, solo el error en lo de Nick Jago, pero es una de las mejores cosas que se ha publicado hasta el momento y queremos dejarlo registrado.
Con videos y fotos lo puedes ver aquí:
www.zona.cl
YA SABEN, BRMC EN CHILE:
03 de Octubre, Headline Show
Teatro Caupolicán, Santiago de Chile
Entradas a la venta en www.ticketmaster.cl
Valor $12000 pesos (más costo de servicio).
qué pena me da mi reseña al leer ésta, jajajaja
ResponderEliminar